POLICIALES
14 de julio de 2020
EL PRESUNTO LADRÓN DEL KAYAK DE NORDELTA QUEDÓ IMPUTADO POR SEIS HECHOS Y SALIÓ DE LA CÁRCEL EN MAYO
Se trata de Carlos Adrián Diez (38), quien se encontraba este lunes alojado en los calabozos de la comisaría 4ta. de Tigre.
El hombre detenido ayer como presunto autor de una serie de robos y hurtos en el complejo Nordelta, del partido bonaerense de Tigre, quedó imputado de seis hechos cometidos durante las casi 20 horas que estuvo dentro de dos de los barrios, y hacía dos meses había recuperado la libertad tras cumplir una condena de tres años y medio de cárcel por delitos contra la propiedad, informaron este lunes fuentes judiciales y policiales.
Al ser indagado esta tarde por videollamada por la fiscal de la causa, Laura Capra, el acusado se negó a declarar, contaron fuentes judiciales.
La titular de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) descentralizada de Benavídez pidió ante el juzgado de garantías la conversión de la aprehensión en detención y lo dejó imputado por un total de seis hechos: un robo simple y cinco hurtos.
Tras el análisis de los videos de cámaras de seguridad que registraron sus movimientos, Capra y los investigadores de la Subdelegación Departamental de Investigaciones (Sub DDI) de Tigre lograron reconstruir el derrotero del delincuente solitario que ayer llegó e intentó escapar de Nordelta navegando en kayak.
Según la pesquisa, el ladrón llegó a las 0.30 de ayer y fue detenido alrededor de las 20, cuando, luego de haber estado refugiado durante varias horas sin poder ser localizado y aprovechando que ya había oscurecido, intentó escapar por el mismo lugar del Lago Central por donde se cree había ingresado, pero fue visto por un vecino que alertó a las autoridades
El hecho más grave, el robo en La Isla, ocurrió en la casa de un contador de 47 años, donde el delincuente encontró una suma cercana a los 100.000 dólares en el cajón de una oficina que el dueño de casa tiene en la planta baja de la propiedad, mientras la familia dormía.
Allí, también forzó pero no logró abrir una caja fuerte y se robó la mochila donde luego fueron recuperados los fajos de billetes, según precisaron las fuentes.
"No solo se llevó el dinero, sino que también, antes de escapar, fue a la cocina, se comió una banana y dejó tirada la cáscara", contó a Télam un jefe policial que participa de la investigación.
La fiscal Capra además le imputa a Diez dos “tentativas de hurto”, uno de ellos agravado por escalamiento, en propiedades de un empresario y un arquitecto del barrio El Golf.
De una de esas casas sacó una cartera Luis Vuitton pero la dejó abandonada en el jardín y, en la otra, fue descubierto caminando por una terraza, razón por la que el propietario alertó a la seguridad y junto a la policía se montó un rastrillaje que recién dio sus frutos por la noche, cuando detuvieron al sospechoso.
Los otros tres "hurtos" que la fiscal le atribuye están relacionados a los tres kayaks que utilizó para desplazarse por esos dos countries interconectados por sus lagos.
En cuanto a los antecedentes de Diez, fuentes del Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB) indicaron que el acusado recuperó su libertad el pasado 5 de mayo desde la Unidad 18 de Gorina, tras cumplir una condena de tres años y seis meses de prisión en causas caratuladas como "robo agravado" y "robo doblemente agravado por el uso de arma, en poblado y en banda".
Según registros policiales a los que accedió Télam, en 2014 Diez fue detenido por robo agravado cometido en jurisdicción de la comisaría 8va. de San Isidro, en Villa Adelina, pero en 2010 ya había sido apresado en Nordelta por hechos muy similares a los cometidos ayer, razón por la que anoche los propios empleados de seguridad del complejo lo reconocieron.
Aquella detención fue el 9 de abril de 2010 en el barrio La Alameda de Nordelta, donde Diez fue encontrado escondido con aparatos electrónicos, relojes, perfumes y cámaras de fotos que habían sido sustraídos de casas de ese country.
En esa ocasión, fue uno de los vecinos damnificados quien se dio cuenta de madrugada que le habían entrado a robar, vio a dos ladrones, los persiguió y efectuó tres disparos intimidatorios.
Los ladrones dejaron tirada una mochila, escaparon corriendo y en horas de la mañana, con la luz del día, atraparon escondido a Diez.