Una fiesta clandestina, con alrededor de 700 personas, 60 autos y disc jockey, fue desactivada en la zona de Médanos "La Olla", en la localidad balnearia bonaerense de Pinamar, en el mismo lugar donde ocurrió lo propio el fin de semana pasado.

Según informó el Ministerio de Seguridad bonaerense, al momento de dispersar a la concurrencia y proceder a la aprehensión de los responsables, "uno de los involucrados agredió al personal policial y se negó a brindar sus datos para ser identificado, con lo cual su detención también se realizó por resistencia a la autoridad".

El resto de los concurrentes fueron retirándose con normalidad.

En este caso, intervino la UFID 4, a cargo del doctor Juan Pablo Calderon y el Juzgado Federal de Dolores, secretaría del doctor Gustavo Puppo.

Por otra parte, también fue clausurado por segunda vez el parador balneario UFO Point, luego de que personal del REBA, fiscalización y División Técnica de Bomberos Costa del Este, constataran y labraran un acta por infracción sobre normas de seguridad antisiniestral no cumplidas debidamente.

En el operativo fueron desalojadas unas 100 personas, agregó el Ministerio de Seguridad, con intervención del Juzgado de Paz a cargo de la doctora Silvia Adriana Guglielmetti.

Participaron del operativo, personal del ReBA (Registro provincial para la comercialización de bebidas alcohólicas), ReCap (Registro Público de Controladores de Admisión y Permanencia), Agencias Privadas y los grupos especiales de la Policía de la Provincia de Buenos Aires, GPM, UTOI, Superintendencia de la FOE, Siniestral y Vial, coordinadas por el director provincial para la Gestión de la Seguridad Privada, Marcelo Montero.

Montero expresó, según el comunicado: "nos encargamos de fiscalizar y controlar la nocturnidad; lo cual se intensificó claramente por la pandemia y especialmente a partir de la etapa del DISPO. “La premisa es evitar una suba descontrolada de los casos de COVID, que puedan desbordar el sistema sanitario; como pasó en Europa en la primera etapa de la pandemia".

"Recordemos que en Argentina, el sistema sanitario no colapsó, el sector de la salud se encontraba muy vulnerable al asumir el nuevo gobierno y a pesar de todos los inconvenientes, logramos sortear esa problemática que se resume en vidas", expresó Montero.